domingo, 11 de octubre de 2009

Blancanieves y los siete enanitos



Estrenada el 21 de Diciembre de 1937 y basada en el clásico cuento de los Hermanos Grimm, fué un éxito rotundo, convirtiéndose en la película más taquillera hasta esa fecha y conservándose aún hoy en día en los primeros puestos si se tiene en cuenta la inflación. Pero el secreto de su éxito fué muy complejo. Algunos la llamaron Disney's Folly (la locura de Disney), y no sin razón, pues Walt arriesgó todo lo que tenía para llevar a cabo tan titánica obra cuyo presupuesto inicial era de medio millón de dólares que, debido al afán de perfecionamiento de Walt, fueron poco a poco multiplicándose hasta casi alcanzar la impresionante cifra de 1,5 millones (hablamos de 1937).

El desarrollo de la cámara multiplano
, fue en gran parte responsable de este aumento de presupuesto. La idea surgió en 1934 y varios títulos rondaban en la cabeza de Walt (Alicia en el País de las Maravillas, Peter Pan, Bambi...) y empezó la pre-producción de todos ellos hasta decidirse al final por Blanca Nieves y archivar el resto para realizar futuros largometrajes en caso de tener éxito. Pero no fué fácil llevar a cabo todo el trabajo, debido a la desconfianza de los inversores. United Artists le dió la espalda a Walt Disney porque no confiaban en el proyecto, a pesar de que Walt les garantizó un adelanto de los posibles beneficios que obtendría el film.

Walt lo arriesgó todo para llevar a cabo la realización de su película. Su mujer Lillian y su hermano Roy trataron de disuadirle, mientras que la industria de Hollywood se burlaba de él llamando a su proyecto "La locura de Disney". Su mujer le dijo una vez que nadie iba a pagar nada por ver una película de enanos. Blanca Nieves fue el resultado final del plan de Walt Disney para mejorar la producción de dibujos animados y obtener beneficios de una fuente distinta a la de los cortos. Durante años se fueron experimentando y perfeccionando nuevas técnicas en sus cortos para obtener los mejores resultados posibles en el primer largometraje del estudio. Tal fue el caso de la cámara multiplano, que se usó en el corto ganador del Oscar "El Viejo Molino".

Varios fueron los nombres que se barajaron para los enanitos (Scrappy, Cranky, Dirty, Awful, Silly, Daffy, Flabby, Jaunty, Biggo Ego, Chesty, Bald, Gabby, Nifty, Sniffy, Burpy, Scaredy, Lazy, Puffy, Elisey, Dizzy, Stuffy, Gassy, Tubby, Mr. Shy, Cheery, Flaunty, Hairy y Grabby fueron algunos de ellos), los elegidos finalmente fueron los que ya conocemos:
"Bashful," "Doc," "Dopey," "Grumpy," "Happy," "Sleepy" y "Sneezy" (Tímido, Sabio, Mudito, Gruñón, Feliz, Dormilón y Mocoso).
  • Doc
  • Dopey
  • Sleepy
  • Sneezy
  • Happy
  • Bashful
  • Grumpy
Disney no tenía por entonces su propia compañía discográfica por lo que Bourne Co. Se ocupó de los derechos de las canciones compuestas por Frank Churchill y Larry Morey y la música de Paul J. Smith y Leigh Harline. Bourne Co. sigue teniendo los derechos de la banda sonora de Blanca Nieves y los 7 Enanitos. Disney pudo recuperar los derechos de las bandas sonoras de otras películas, pero no estos. Esta fue la primera banda sonora publicada de una película americana en el momento de su estreno. Hasta entonces este tipo de grabaciones no gozaban de ningún éxito y carecían de importancia para las productoras cinematográficas. Fue nominada al Oscar a la mejor banda sonora, pero no ganó. En su lugar, la niña prodigio Shirley Temple hizo entrega a Walt Disney de 8 estatuillas (una grande y 7 pequeñas) honoríficas por la creación del primer largometraje de animación de la historia.



Sonido
Debido a que la imagen debe tener un paralelismo exacto con la pista de sonido, se hizo una plantilla para toda la película. Cada dibujo incluía notas para ayudar a los artistas en su trabajo, y sus dibujos se separaron lo justo para que fuesen acorde al sonido. A partir de estas plantillas los artistas, dibujantes y técnicos de sonido, trabajaron fotograma a fotograma para construir cada parte de la película. Hace poco observé a los actores y músicos, todos provistos con auriculares, mientras grababan el diálogo y la música. Cada sílaba y cada nota empezaban y terminaban con un golpe rítimico. Gráficos de las voces con las palabras marcadas, se repartieron a los artistas, que estudiaron cada párrafo escuchando las voces y creando la acción, y dando forma a los labios según las palabras que escuchaban. Cuando un animador creaba los movimientos de los labios para sincronizarlos con una palabra, frecuentemente recurría a la pista de sonido para saber exactamente cuantos fotogramas necesitaba para completar cada movimiento.

Cuando los enanitos tropezaban contra la vajilla y la tiraban al suelo, escuchaban la cinta que les permitía sincronizar los dibujos con lo que escuchaban.
El sonido representa un constante problema para el dibujante, pues no puede usar los sonidos de una manera concreta, como se hace en el caso de la acción real. Aquí debe hacer que concuerde el sonido con la acción, fotograma a fotograma. En una escena, uno de los enanitos sube las escaleras y se asusta, los otros seis, espantados corren y entre todos hacen caer la vajilla. los utensilios de cocina desparramados suenan algo diferentes a través de un altavoz, por lo que los técnicos de sonido apilaron un montón de cajas en el estudio y grabaron los sonidos que producían al caer al suelo. Después, los animadores, escuchando la grabación sincronizaron golpe a golpe los dibujos con el sonido. El sonido de cristales rotos se hizo tirando una lámina enorme desde una escalera de 8 pies que era sujetada por dos hombres. Hubo momentos del guión requerían un trabajo mucho más complicado por parte de los técnicos de sonido.

¿Cómo sonaría un espejo mágico? ¿Que clase de ruído harían siete enanitos comiendo sopa? y lo más importante: ¿Cómo resultaría el sonido en la banda sonora? Estos problemas constituían un dilema. Fueron los ingeniosos magos del sonido los que los solucionaron. Imaginaron que si un espejo hablase, sonaría una voz masculina con un sonido sepulcral. Durante semanas se grabaron voces en cajas, a través de sábanas, delate de mamparas... Por fin a uno de los técnicos se le ocurrió construir una caja con parches de tambor en cinco lados, dejando abierta la sexta. en la apertura el actor introducía su cabeza y hablaba frente al micrófono convirtiéndose en el espejo mágico.



Para lo de la sopa, siete trabajadores del estudio se sentaron en una mesa durante día y medio, sorbiendo leche malteada y comiendo wafers. los sorbidos cortos representaban la parte tenor y los largos eran los bajos. Cuando los enanos se lavaban mientras cantaban, siete hombres se reunieron al rededor de un barreño lleno de agua del tamaño de cinco bañeras, lavando sus caras y sumergiendo sus cabezas y cantando bajo el agua. Los sonidos subacuáticos se grababan con un micrófono hermético. Y para representar a alguien caminando dentro de un charco, usaron el mismo barreño lleno de barro en el que un hombre se metió durante varias horas con un metrónomo que le marcaba el ritmo de los movimientos.


Color

El uso del color ha avanzado mucho en los dibujos y su uso es tan mecánico como el del sonido. En un solo plano, Blanca Nieves aparece en quince tonos diferentes, seleccionados entre los 350 colores básicos disponibles en el laboratorio de color del estudio. Estos tintes varían desde el 685-1/2 (zapatos amarillos) al pastel 23 (mejillas). Cuando canta, se añaden 6 colores distintos a sus ojos y boca en los primeros planos, que van desde el naranja-amarillo al rojo vivo para los labios. Sobre cada dibujo se anotan los colores que llenarán cada área del dibujo y después, un montón de chicas se encargarán de rellenarlos según el número. Los dibujos se componen de entre tres y siete cels en cada plano, dependiendo de la acción de los personajes. Por norma general se usan cuatro cells por plano. Supongamos que fotografiamos a Blanca Nieves cantando. Para esta secuencia, entendiendo que el personaje tendrá movimiento, el primer dibujo será el fondo, por ejemplo la pared de la casa. El siguiente dibujo en un cel será su cuerpo sin brazos ni cabeza. Para mostrar los movimientos necesarios sincronizados con la música grabada semanas antes, se colocan dos cels, uno conteniendo a cabeza y otro los brazos. Tras cada fotografía se sustituyen los cels que sustituyan a éstos. Este proceso se repite aproximadamente cada sesenta fotogramas hasta que se termina un movimiento completo. Proyectados a razón de 24 fotogramas por segundo se crea la ilusión de movimiento en color.




Fuente: Walt Disney Archives

4 comentarios:

Felix Casanova dijo...

¡Estupendo post Campanilla¡ Soy un enamorado de estas películas y has aportado datos muy interesantes. Da gusto pasar por aquí. Un abrazo

Galia dijo...

Me encanta este cuento, bueno, la verdad que me encantan todos los cuentos...je,je,je...
Mi próximo conjuntito de cuentos va dedicado a Blancanieves...

besos

El Tercer Chimpancé dijo...

Excelente post Campanilla. Me puse a leer y la verdad que me quedé pegado. Te diste un buen trabajo (trabajas para Disney? :)). Me encantó poder informarme de cosas que por lo general uno no se entera.
Lo repito: Excelente post(dos pulgares arriba).
Un abrazo

Campanilla dijo...

Chimpancé, qué va, no trabajo para Disney aunque no me importaría. Y la verdad es que sólo recopilo información de la web, vídeos y fotillos, nada complicado, pero gracias
Un beso